En el mundo 2.0 hay unas leyes. Unas reglas que difieren, a pesar de estar influidas, por la vida 1.0 en la que vuestros soportes físicos aún se empeñan en vivir. Sin embargo, cada vez más la legislación del mundo 2.0 se hace más complicada, enrevesada y compleja, y la represión adquiere maneras nuevas y peligrosas, que, como en pretéritos tiempos de la anécdota 1.0, crecen cual hidra de manera amenazadora, poniendo en jaque la verdadera libertad de esta sociedad utópica y supuestamente responsable que es la sociedad de la red. En recurso de la absoluta agitación que se abate sobre el ?mundo real?, vuestras maneras de vida informáticas no han pemanecido al margen. Terrorismo, activismo y también represión llaman a la puerta de vuestro explorador de Internet en busca de vuestro alistamiento a una guerra en la que los poderosos ya nos han metido. Enrolarte en uno u otro bando es una decisión de cada uno, a pesar de que, como en todas las guerras, vuestro estatus y posición social 2.0 influya, poderosamente, en cuál es vuestra alternativa más lógica.
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