Tolerancia implica respetar y aprender de otras personas, evaluar las diferencias, tender un puente entre las brechas culturales, rechazar los estereotipos injustos, encontrar afinidades y crear nuevos lazos. Tolerancia, en muchos sentidos, es lo contrario a prejuicio. Pero ¿la tolerancia implica que se deben aceptar todas las conductas? Por supuesto que no. Las conductas que no respetan o que hieren a otros; como por ejemplo, ser malo o acosar a alguien, o las conductas que rompen las normas sociales, como robar, no deben tolerarse. La tolerancia se trata de aceptar a las personas tal como son, no las malas conductas. Podríamos pensar en la capacidad de saber oir y aceptar a los demás, valorando las diferentes maneras de comprender y posicionarse en la vida, siempre que no atenten contra los derechos fundamentales de la persona... ¿Cómo pueden educar los padres a tolerar? - Observe sus particulares actitudes. Los padres que quieren ayudar a sus hijos a evaluar la diversidad quizá sean susceptibles a los estereotipos culturales que aprendieron y hacen un trabajo por corregirlos. Cuando los padres impulsan la tolerancia en sus hijos, hablan acerca de sus valores y dan un ejemplo de las conductas que quieren ver en ellos por recurso del trato amable para con los demás, sus hijos seguirán sus pasos. ¿Cómo pueden educar los maestros a tolerar? - La tolerancia se puede laborar desde la infancia mediante el modelo y la actitud que el educador proporciona en el día a día. - Las acciones educativas estarán dirigidas a la promoción del conocimiento sobre lo que poseemos en general con cualquier otra persona y sobre el modelo que damos de aceptación y respeto ante la diversidad. -La educación para la tolerancia debe de tener en cuenta el respeto a la dignidad de la persona, construir la cultura de la solidaridad y el compromiso; exponer que la diversidad es complementariedad y "no conflicto". -Ofrecer a los niños un modelo de relación en donde se pueda ver de manera natural la integración de niños de otras razas, de niños con necesidades educativas especiales; el trato igualitario en las oportunidades de maneras de desarrollo y "estar en la vida" de niños y niñas, la integración en actividades dentro de la escuela de las distintos generaciones familiares, padres y abuelos; el conocimiento de otras tradiciones procedentes de distintos culturas, etc... El desconocimiento lleva a juzgar mal a los demás, sobre todo si sólo se tienen en cuenta las apariencias. Éste es el asunto inicial del libro. Solamente la observación de la actuación y la forma de relacionarse, asimismo de las preguntas adecuadas, servirán para evaluar justamente a quienes no conocemos. Lo significativo es el interior, que es donde se halla la verdadera personalidad. Fuente: educa.madrid.org/web/eoep.at.../tolerancia.htm
viernes, 21 de marzo de 2014
Bromas y Chistes, Cómo enseñar la tolerancia en los niños
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